Hay muchas razones para enamorarse de esta prenda, el vestido es cómodo, versátil, femenino e incluso favorecedor.
Los vestidos forman parte de esas prendas aliadas de cualquier temporada, pero en primavera y verano se vuelven un must. Es un outfit fácil de combinar y transformar para el dia o la noche con accesorios y calzado.
¿Qué modelos elegir esta temporada?
No hace falta que te sumerjas en vestidos ajustados e incómodos (pero si son lo tuyo ¡adelante!), la clave para llevarlos siempre está en ser fiel a tu estilo. Si eres de las más románticas, un estampado en tonos pasteles no te puede faltar y por el contrario, si tu estilo es clásico, moderno y hasta minimal, las líneas rectas y tonos neutros serán lo tuyo.
Recuerda que los vuelos o volantes siempre proporcionarán volumen y que marcar la cintura es clave para no perder curvas. Si no quieres marcar la zona del vientre, es mejor que escojas vestidos con corte debajo del busto, ya que te ayudarán a definir la cintura y te darán movimiento en la parte inferior.
Si buscas estar cómoda, prueba y anímate a la combinación con zapatillas. Hay muchos modelos de zapatillas que tienen diferentes improntas y van desde las más convencionales estilo «Converse» o a las más arriesgadas como las «Falcon» de Adidas. Otras opciones para combinarlos son: ballerinas, chanclas, sandalias con o sin tacón y mocasines.
¡Y por último no te olvides de los accesorios!. Es momento de probar y arriesgar con bolsos o complementos para el cabello, porque los vestidos pueden ser muy simples pero el touch de personalidad siempre se lo darás con tu propio estilo.








