La semana de la moda en París cerró a lo grande. Teniendo a la Alta Costura como protagonista, Dolce & Gabbana puso fin a esta edición que se llevó a cabo en la ciudad de Palermo, Sicilia.
El glamour y la sofisticación acompañaron a esta colección. Los ornamentos y piezas exuberantes pero también refinadas fueron protagonistas. En este sentido, podríamos decir que el estilo señorial que caracterizó el espacio donde fue llevado a cabo este desfile, ha sido perfecto para envolver una serie de piezas cargadas de romanticismo y aristocracia.
¿Qué predominó en esta colección?
Volumen, piezas rígidas y detalles dibujados con el arte como estandarte. Con una mezcla de épocas, se pudo observar una colección que se animó a jugar con un mix renacentista y victoriano.
Sin dejar los arreglos florales que han caracterizado las últimas temporadas acompañaron con un maquillaje sutil que realzó los labios en colores rojizos y borgoñas.